domingo, 18 de diciembre de 2011

LAS MASCARAS DE OAXACA

Recopilación de Elbert Damián

Proceso y Elaboración de Mascaras Madera.

El trabajo en madera forma parte del arte popular mexicano, tan vistoso y colorido. La gama de productos de madera de Oaxaca es variada, y entre los famosos trabajos que se producen en Oaxaca podemos mencionar las máscaras y los juguetes de madera.

Las máscaras de madera son famosas en Jamiltepec; éstas representan tigres, panteras, leones, conejos y toros; así como rostros humanos para las fiestas tradicionales. El hombre ha usado máscaras desde tiempo inmemorial. Elaboradas con materiales diversos, sus motivos han sido rituales y ornamentales. En la vida y en la muerte las máscaras participan de la magia, y a través de ella infunden respeto y terror. Entre los pueblos primitivos la magia precedió a la religión. El hombre creía que su alma podía encarnar en otros seres por virtud de la magia y el misterio. Ocultar el rostro significaba convertirse en otro sujeto, ya sea en el animal o en el ser sobrenatural que quería representar. La máscara era siempre sagrada, ya que encarnaba el espíritu guardián que se invocaba para tener éxito en la guerra o en la caza.

La tradición indígena de marcadas influencias prehispánicas se impone con mucha frecuencia en la elaboración de juguetes de madera. Sobre todo en ciertos pueblos o regiones, donde la producción de juguetes, aunque de muy escasa demanda, no presenta mucha variación, por la incomunicación del artesano y la dificultad, por tanto, de intercambiar patrones diferentes. En Oaxaca se fabrica una gran cantidad de muñecos y animales, toscamente hechos de madera policromada. En algunos casos las figuras presentan los brazos rígidos, tallados separadamente y pegados al cuerpo por medio de clavos.

El proceso


Para la elaboración de las máscaras, el artesano elige las maderas de zompantle o colorín, parte el tronco y lo empieza a "carear o montear", Las maderas preferidas por los talladores oaxaqueños son el cedro, caoba, cupapé, primavera, guanacastle, guayacán, ciprés, pino, hormiguillo y pinabeto.

Este proceso consiste en empezar a dar forma a las caretas con gubias, cuchillos y formones, indistintamente. Para vaciar la parte posterior, utiliza una gubia que golpean con un mazo de madera, el vaciado consiste en restar aquellas partes de la madera que no serán utilizadas y que le darán la forma que el artesano busca, esto facilitara la definición del la mascar y el tallado de la misma

Posteriormente sigue el tallado y la definición que dejan secar ( la máscara) por varios días, para evitar que se apolille o conserve humedad. Este paso sirve principalmente para que la máscara tenga mayor vida y calidad, ya que sin este proceso la máscara conservaría humedad y en el siguiente proceso que es el horneado seria más complicado

Posteriormente se coloca en un pequeño horno y se somete a un tratamiento con calor durante aproximadamente una hora para contrarrestarle la humedad que conserva todavía, el tiempo de horneado depende del tamaño de la máscara y la madera que se esa utilizando.

Enseguida se pule perfectamente con lija de agua y resana la superficie, cubriéndola con una mezcla hecha a partir de yeso blanco de zinc , esto para reforzar y recubrir los orificios que podrían cuartear la máscara en un futuro, así se conservara por mucho tiempo.

Ahora, se deja secar bien antes de maquearla con sisa y mimácata, que sirve para lograr los fondos de color.

El artesano define los colores que originalmente se utilizan, anteriormente se utilizaban colores que se extraían de material orgánico, como hojas, semillas, arcillas y algunos insectos, Cuando se desea obtener un fondo claro, se agrega polvo de igueteca que aclara los colores y les da cuerpo; si se quiere obtener un fondo oscuro, se usa patzicua, tierra volcánica molida de color negro, Aunque en la actualidad se utilizan pinturas sintéticas echas a base de alcoholes y resinas.

Con sus dedos, el artesano unta la sisa sobre la superficie de la máscara. La deja secar y aplica el color deseado, hecho polvo fino; deja orear y luego pule con la mano o con un bruñidor de piedra. Enseguida, da otra pasada con aceite y vuelve a pulir; aplica otra capa de sisa y más polvo de color y deja secar de nuevo. Esta operación la repite hasta obtener el fondo deseado. Al final de esta etapa, frota la superficie con un algodón: si queda blanco, la máscara ya está lista para ser decorada. Una vez que la pieza ha secado bien, la frota o pule con una franela o estopa untada en aceite de linaza hasta sacarle brillo.
Sobre el maque pulido y limpio, el artesano dibuja con un punzón o con un lápiz de punta dura los ojos, barba y cejas. Ahuecan los lugares indicados y añaden los colores convenientes para resaltar las facciones y gestos.

El pelo suele estar tallado y pintado directamente sobre madera, pero en algunos casos, se utilizan materiales suplementarios como ixtle, lana, cera, malla de alambre, hojalata, cartón, pelo de animal, etcétera. Los ojos generalmente están esculpidos y pintados y dejan un pequeño orificio para poder ver. En el caso de máscaras grandes, tienen orificios nasales.
Las máscaras de Oaxaca son rostros y manifestaciones del mundo invisible, de la religiosidad, creencias que determinan la cultura. Cada máscara es una expresión de todo un conglomerado de creencias.

El hombre se siente transformado por medio de una máscara en alguien que admira o quiere alcanzar, se siente apto para invocar a sus dioses con mayor fervor. Ideas, motivos y símbolos de las diversas culturas es lo que encierran estos elementos que enriquecen nuestras danzas mexicanas.

La mayoría de las máscaras contemporáneas están hechas con madera; otros materiales son usados sólo para conservar las características originales de algunos diseños. Las máscaras de Oaxaca son menos realistas y tienden a reflejar la vida y el humor nativo, los únicos indígenas oaxaqueños que han conservado un estilo son los huaves. Ellos tienden a usar materiales y motivos animales en sus máscaras; las tres más importantes son las de tortuga, víbora y armadillo

1 comentario:

  1. es interesante conocer otros municipios de oaxaca tan ricos en artesanias, es importante concer y valorar su trabajo, ya que es un oficio que desprestigian o regatean. sin embargo no me queda claro donde se ubica exactamente a que distancia del centro de oaxaca.

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